(Cortesía de segverfran)
Clara, distinta Clara,
extraña entre su gente, mirada ausente.
Clara, a la deriva,
Clara, abandonada
en brazos de otra soledad.
Esperando hacer amigos por la nieve
al abrigo de otra lucidez,
descubriendo mundos donde nunca llueve,
escapando una y otra vez.
Achicando penas para navegar...
estrellas negras vieron por sus venas
y nadie quiso preguntar.
Clara se vio atrapada,
abandonó el trabajo,
se vino abajo.
Clara languidecía
perdida en un camino
de ansiedades y ambrosías.
Clara no dijo nada
y un día desapareció.
ajustando el paso a los demás,
intentando cualquier cosa por dinero
para incarse fuego una vez más.
Esa madrugada
Clara naufragó,
tenía el mar de miedo en la mirada,
las ropas empapadas
y el suelo por almohada,
y lentamente amaneció.