Entre pastos ahogados en alquitrán,
entre nubes de humo de color gris,
entre pan, adoquines y agua sin sal,
entre lluvia de barro y nada de abril,
entre Sol de uralita y calefactor,
entre Luna invisible y cielo, sin más,
entre árboles negros como carbón,
entre eso o las ganas de respirar.
Me retiro de tu pose, de tu credo,
me retiro del estilo de lo altivo,
no me retiro....
de tu calle, de tu cielo, de tu camino.
Nada se escapa,
aunque lo pueda parecer
nada se escapa,
delante del mapa está todo lo que ves
nada se escapa.
tu mundo y el mío,
tu selva, tu casa,
nada se escapa.
Entre cartas antiguas por contestar,
entre folios en blanco por escribir,
entre lápices viejos por afilar,
entre tantas revistas que no leí,
entretén a las masas en el salón,
entregando las cartas en cada bar,
entrenando a los ojos para el adiós,
entre eso o las ganas de respirar.
Me retiro de tu pose, de tu credo,
me retiro de tu frase, de tu verbo,
me retiro de tu boda, de tu velo,
me retiro del estilo de lo altivo.
Y no me retiro
de tu agua, de tu mesa, de tu vino,
y no me retiro
de tu calle, de tu cielo, de tu camino.
Nada se escapa,
aunque lo pueda parecer,
nada se escapa
delante del mapa
está todo lo que ves,
nada se escapa
tu mundo y el mío,
tu selva, tu casa,
aunque lo pueda parecer
nada se escapa
delante del mapa
está todo lo que ves,
nada se escapa
tu mundo y el mío,
tu selva, tu casa,
nada se escapa.
